Hoy toca hablar sobre recuerdos de la infancia, y más concretamente, de mi relación con el mundo del cómic.
Desde pequeño, recuerdo que en mi casa nunca faltaban las últimas aventuras de Mortadelo y Filemón, aquellos Tebeos que mi madre nos traía de Granada y que mi hermano y yo esperábamos ansiosamente.
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| Mortadelo y Filemón |
Era un cómic tamaño A4 y con las pastas duras, pasaba horas y horas leyéndolos sin cansarme de las aventuras de estos agentes de la T.I.A, Técnicos de Investigación Aeroterráquea. El Profesor Bacterio, ese científico loco que creaba multitud de inventos para mejorar las investigaciones de Mortadelo y Filemón, pero que siempre tenían alguna tara que conseguía lo contrario. La señorita Ofelia, enamorada perdidamente de Mortadelo, o El Superintendente Vicente, que como buen jefe, siempre tenía reservadas las misiones más difíciles a sus mejores agentes. Siempre me preguntaba como, por muy delgado que estuviera Mortadelo, conseguía disfrazarse de personajes más pequeños que él, serpientes, moscas, gusanos, era algo que no llegaba a entender.
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| Francisco Ibáñez |
No solo leía historietas de Mortadelo y Filemón, otros de mis favoritos eran Superlópez, antítesis española de Superman, o Rompetechos, un personaje que se caracterizaba por ser bajito, cabezón y cegato. Sinceramente, siempre he pensado que Rompetechos se diseñó a imagen y semejanza de su creador, Francisco Ibáñez, aunque en la biografía de este personaje se haga alusión a otras versiones.
En mi infancia, también ha habido lugar para el manga, lo descubrí con la super-serie Bola de Dragón Z, que emitió Canal Sur, recuerdo cuando llegaban las cinco de la tarde y estábamos jugando en la calle, nos íbamos a casa para no perdernos las aventuras de Goku y Krilin, Chichí, etc. Cierto es que me gustaba seguir más la serie por televisión, pero en casa no faltaba ningún cómic de Bola de Dragón, mi hermano coleccionó la Serie Blanca y la Serie Roja completas.
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| Javier Recio y Antonio Banderas |
Mi relación con el mundo del cómic, se intensificó cuando empecé a estudiar la rama artística de Bachillerato, en la Escuela de Artes y Oficios de Granada, allí compartí pupitre con grandes creadores de cómics, algunos de ellos, como Javier Recio, han conseguido cumplir su sueño, trabajar en DreamWorks y participar en la película El Origen de los Guardianes.
Javier ya triunfó en su día consiguiendo el Goya al mejor corto de animación en 2010 con "La Dama y la Muerte" y la nominación al Oscar ese mismo año.
En la actualidad, mi relación con el cómic ha desaparecido casi por completo, la única relación que tengo es a través de las películas de animación, que me encantan.
Hace poco, mi madre me confesó que tiene guardados todos los cómics de mi infancia, para que, al igual que ella hizo en su momento, yo pueda compartirlos con mi hija llegado el momento.
Por último, os quiero hacer partícipes de mi pequeña aportación al mundo del Cómic. Os presento a Manolillo Internight, un personaje que se define como "Friki de Internéh" y cuya principal preocupación es no perder la conexión a internet, aunque, alguna veces, sufra por ello.
Un saludo.
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